Yo lo hice para navidad, pero lo repetiré para fin de año porque fue todo un éxito, y además es super rápido de preparar. Recomendado 100%
Ah, se me olvidaba, no es más que un tiramisú en una copa de martini. Más fácil todavía
Elaboración
Con un poco de antelación preparamos el café. Tiene que haber suficiente para todas las copas, así que podéis calcular más o menos. Si es para alguien que no pueda tomar cafeína, pues los hacemos descafeinados. Yo le añadí un chupito de licor café que me traje de Santiago de Compostela hace un tiempo cuando terminaba el máster. ¡Como aguanta el tipo!
Para preparar las copas, primero disponemos un bizcocho por copa, cortado a pedazos (3-4 pedazos) los rompemos con las manos, no hace falta cortarlos a medida porque luego se empaparán de café.
Cuando el café esté frío vamos empapando los bizcochos con el café, sin pasarnos... Mejor ir echando poco a poco hasta que todos los bizcochos queden empapados de café.
Mientras se van empapando montamos las 2 claras en la batidora con una o dos cucharadas de azúcar granulado. Reservamos.
Ahora en otro recipiente montamos un poco las yemas (blanquear) con un poco de azúcar (os podéis ayudar con una cucharadita de agua caliente). Añadimos el mascarpone y mezclamos (sin batir mucho, pues se puede cortar el queso). Probamos de azúcar y le añadimos más, o le añadimos miel. Esto es un poco al gusto. A mi me gusta que quede poco dulce, así luego contrasta con el café y el cacao.
Mezclamos las claras poco a poco (1/3 de vez) con la mezcla del queso. Intentaremos que no se bajen mucho.
Repartimos la masa en las copas de martini. Yo me ayudé de una cuchara de servir helado, la misma que uso para rellenar las cápsulas de los cupcake. No lo llenéis mucho, que no sobresalga. Reservamos en la nevera (importante!! lleva huevo!!) hasta consumir (no más de un día...). Se recomienda un mínimo de media hora - una hora para que asiente bien.
Antes de servir, espolvoreamos con abundante cacao en polvo. Tiene que ser cacao en polvo, del amargo. No sirve cola-cao o sucedáneos azucarados. Al comerlo tiene que haber un contraste de lo amargo del cacao con la suavidad del queso. Tampoco echéis el cacao mucho rato antes, o se quedará feo encima de la copa al humedecerse.
Si lo probáis, vais a repetir
Os dejo el link del blog: http://alittlepieceofbatter.blogspot.com.es/2014/12/tiramisini.html
¡Feliz Navidad cocinillas!