Fermín no influye para nada en la acción del portero con el remate de Lewandowski.
Lewandowski remata, el portero se tira para intentar pararla, no llega y el balón entra. Quitas a Fermín de la posición donde estaba y todo hubiese pasado igual. Lewandowski hubiese rematado, el portero se habría tirado para intentar pararla, no llega y el balón entra.
Otra cosa es que Fermín estuviera justo delante de la pelota y el portero no la viera por ello, o que su posición hiciera que el portero no pudiera tirarse, pero es que no ocurre nada de eso. Todo ocurre sin que la posición de Fermín evite o impida nada.