El cambio de ciclo ya se atisba
Pipa
Mientras que media España está metida en la playa o en la montaña y la otra media angustiada por esa lacra terrible del paro y esa prima de riesgo que nos va a quitar el sueño un día sí y otro también, el Madrid y el Barça asoman la patita con discreción, sin sus internacionales, convencidos de que vamos a asistir al gran duelo final. El que marcará el cambio de poderes, el que consumará el CAMBIO DE CICLO. Tito Vilanova fue importante de verdad en la era triunfal de Guardiola, pero que nadie olvide que Pep era el líder, el referente para la plantilla y para la afición. Así que sin él, Messi y compañía se van a sentir huérfanos en cuanto que llegue un mal resultado. Y ya no te digo Rosell, que no cree en Tito pero lo contrató para apagar el fuego mediático y popular que sabía que le iba a caer encima por haber provocado la marcha de Guardiola con su necedad. Rosell habla de que la Liga del Madrid, ganada con todos los récords de la historia, fue “extraña”. Hasta Mascherano le ha sacado los colores. Rosell, mejor guarda silencio y aprende de tu amigo Florentino. Digo amigo porque lo sois, aunque tú reniegues hasta tres veces como hizo San Pedro con Jesucristo.
El caso es que el Madrid de Mourinho destila serenidad, templanza, programación sabia, organización y firmeza. Si viene Modric, bien. Y si no, Mou sigue teniendo la mejor plantilla de Europa. En semifinales de la Eurocopa había 10 jugadores blancos (5 españoles, 3 portugueses, 2 alemanes). Bestial. Además, gente como Huguaín se puede convertir en el gran ‘fichaje’ de la temporada. Gonzalo llega con hambre y dispuesto a recuperar ante Karim el terreno perdido la temporada pasada. Y hay cantera de luxe. El Castilla lucirá en la división de plata con Jesé al frente, el mejor jugador de Europa con menos de 19 años. El Madrid tiene motivos para estar tranquilo, con dos de sus jugadores optando al Balón de Oro (Iker y Cristiano), con una afición ilusionada como nunca, una plantilla joven, un Mourinho relajado que hasta ha logrado que Paramés dé excedencia este año a su Twitter y con una nueva cara que refleja el estado el bienestar del madridismo. La Supercopa será la primera gran piedra de toque para constatar todo lo que he escrito. Toca disfrutar de las vacaciones y de una pretemporada que incluye la conquista de California, la tierra de los sueños. Y esos sueños ahora vuelven a ser blancos. Como en los viejos-buenos tiempos. ¡HALA MADRID!