Adiós a la vieja Champions League. La Uefa ha diseñado un nuevo formato de competición destinado a seducir a los clubes más poderosos del continente para que dejen atrás la idea de la Superliga. Más partidos, y por tanto, más ingresos por tcketing y televisión son las claves del cambio. La Uefa trabaja a contrarreloj para que la Superliga se quede tan solo en un proyecto, confiando en que los clubes acepten seguir bajo su paraguas. A partir de 2024, planea que la Champions League dirá adiós a la fase de grupos, informa Gazzetta dello Sport, siendo sustituida por una liga de 36 equipos donde cada equipo juega diez partidos bajo el llamado sistema suizo.
Andrea Agnelli, presidente de la Asociación de Clubes Europeos y de la Juventus, es uno de los defensores de este cambio: “creo que es un gran sistema”, aseguraba la semana pasada. “Aunque el número de partidos que juegas en las primeras etapas pueden ser distintos entre clubes”, detallaba Los ocho mejores equipos de la liga se clasificarían automáticamente para los octavos de final, mientras que los otros ocho equipos saldrán de unas eliminatorias entre los equipos clasificados entre la novena y la vigesimocuarta posición de la liga.
Este cambio en el formato de la competición implicará un notable aumento del número de partidos, pasando de 125 a 225 encuentros, lo que multiplicará los ingresos del torneo al aumentar ticketing y derechos de televisión. Además, está renovada Champions League seguirá disputándose entre semana, respetando que las ligas nacionales se jueguen en fin de semana, garantizando el criterio de clasificación en base a las competiciones locales, en contraposición al proyecto de una Superliga cerrada.
Para quien no sepa el formato suizo, es una liga donde se sortea la primera jornada, y luego van jugando solo contra los que tienen tu mismo casillero de victorias/derrotas, así hasta acabar la liga.