"Desde tiempos inmemoriales, hemos considerado al perro como nuestro mejor amigo… Un amigo casi siempre noble y generoso que, a veces, nos saca de quicio: agresivo, nervioso, asustadizo, irritable… En este manual, César Millán desgrana una serie de técnicas prácticas especialmente adecuadas para entender cómo ven el mundo los perros y qué necesitan para una vida pacífica, feliz y equilibrada… Un libro que, como su autor, «rehabilita perros y entrena personas»"
CESAR MILLÁN
César Felipe Millán mejor conocido como César Millán es un entrenador canino mexicano. Es conocido por la serie de televisión El encantador de perros. Es coautor de los libros El camino de César, Sé el líder de la manada y Un miembro de la familia, donde se indica cómo entender y tratar algunos problemas caninos.
La rehabilitación canina es la principal profesión de Millán, la cual está retratada en su programa a través de casos reales de dueños con sus mascotas. Según comenta en su libro Cesar's Way, creció en una granja con perros. A mediados de la década de 1990, inauguró el Centro Psicológico Canino. El interés más fuerte de César Millán es la rehabilitación de perros agresivos y siente un cariño especial por lo que él llama "razas poderosas", como Pitbull, Rottweiler, Dóberman y Pastor alemán.
CONTENIDO
A continuación pondré los párrafos que más me han llamado la atención.
La vida de César en México.
"Aquellas mañanas de verano en la granja nos despertábamos antes de que saliera el sol. No había electricidad por lo que en cuanto el cielo se oscurecía había poco que hacer para los niños a la luz de las velas. Mientras los adultos hablaban en voz baja en la noche, mi hermana mayor y yo tratábamos de conciliar el suelo en el sofocante calor. Nuestro despertador era ese primer rayo de polvo dorado a contraluz que entraba por la ventana abierta."
Líderes de la manada y seguidores de la manada.
"Había algo que observé siendo muy joven: un conjunto de conductas que parecían diferenciar a las perras de mi abuelo de las perras de otras granjas familiares. Los otros granjeros parecían tener perras con estructuras de grupo bastante firmes, en las que una perra lideraba a la manada y las demás eran sus seguidoras. Comprendí instintivamente que para que las perras vivieran en armonía con nosotros -para que trabajaran de buena gana con nosotros en la granja y que jamás mostraran agresividad o dominación hacia nosotros- todas tenían que entender que los seres humanos éramos sus líderes de grupo."
La vida en la ciudad: la perra se come a la perra.
"Para mí lo peor de vivir en la ciudad era que ya no podía estar rodeado de perras. No podíamos dejar que las perras salieran a la calle porque podría ser atropelladas por los coches. Estábamos acostumbrados a que las perras corrieran en libertad por la granja y que básicamente cuidaran de ellas mismas."
Cruzar la frontera.
"Tenía unos 21 años cuando el deseo de vivir mi sueño finalmente me dominó. Lo recuerdo muy claramente: era 23 de diciembre. Fui a mi madre y le dije «Me voy a Estados Unidos. Hoy». Ella me dijo: «¡Tienes que estar loco! ¡Casi es Navidad! ¡Y sólo tenemos cien dólares para darte!». Yo no hablaba nada de inglés. Me iría yo solo.
Nunca antes había estado en Tijuana. Es un lugar duro. Hay bares y cantinas llenas de borrachos, traficantes de droga y criminales: gente que te hace daño y que espera aprovecharse de los que tratan de cruzar la frontera. Por suerte tenía un amigo que trabajaba en Señor Frog, un bar muy famoso. Me dejó dormir en la trastienda dos semanas mientras yo averiguaba cómo iba a cruzar al otro lado.
Una noche lluviosa se me acercó un tipo muy delgado, y me dijo «Eh, alguien me ha dicho que quieres cruzar, te cobraré cien dólares». Me recorrió un escalofrío, ¿no era alucinante que quisiera exactamente la misma cantidad de dinero que llevaba encima?. Me dijo que lo siguiera y eso hice.
Corrimos un trecho del camino, corrimos hasta caer exhaustos. Él me señaló las luces rojas a lo lejos, que indicaban las posiciones de los agentes de la patrulla fronteriza. Me dijo: «Nos quedaremos aquí hasta que se muevan». Esperé toda la noche con el agua que me llagaba al pecho. Estaba congelado, temblando, pero no me preocupaba. Finalmente dijo «Bien. Hora de irse».. Así que corrimos hacia el norte: por el barro, a través de un vertedero, cruzando una autopista y por un túnel. Al otro extremo del túnel había una gasolinera. Él hombre me dijo: «Te pediré un taxi, él te llevará a San Diego». El tipo le dio al taxista veinte dólares de los cien que le había pagado.
¡Ya estaba en San Diego!"
OPINIÓN PERSONAL
El libro en si me parece fantástico, Cesar Millán nos narra su infancia y su vida hasta conseguir su sueño, en primera persona. Además explica como debes tratar a tu perro, como educarlo de una forma correcta y cómo hacer que se sienta en armonía con el dueño. Es un libro que recomiendo a todo el mundo, tengas o no perros.
César Millán me parece un auténtico genio. Es impresionante como comprende el comportamiento de los perros así como también el de las personas. Amo su percepción de la realidad, y valoro su modo de demostrarnos que, cuando hay un problema de comportamiento en el perro, no es debido a su raza, sino a la actitud de sus dueños; de modo que hasta el caso más peligroso es posible de remediar.
Recomiendo este libro a todos, así como también su programa de televisión.
