Vale ya de enfrentamientos personales, haced el favor.
Volvamos al incidente de Aguirre con el cajero, la moto y el agente de movilidad.
Por ejemplo:
"VÍDEO Nueve minutos aparcado sin sanción
Cómo hacerse un 'aguirre' en Gran Vía y no ser multado en el intento
Son las 16.40 del viernes, hace prácticamente 24 horas que Esperanza Aguirre tuvo un incidente policial en el centro de Madrid y vamos a intentar emularla. Es decir, parar en pleno carril bus en el corazón del centro mismo de Madrid, salir a sacar dinero de un cajero cercano en medio de la pitada general y del mar de coches, y reemprender la marcha, intentaremos, sin 'multita' ni 'bronquita'. Nos vamos a marcar, en definitiva, un aguirre.
Aunque para ello, dado que ninguno de nuestros redactores es ex presidente regional y no queremos tentar a la suerte, vamos a emplear a dos personas (una al volante y otra al cajero), por lo que en puridad estaríamos hablando de un aguirreB. La ex lideresa intentó la versión premium, en solitario, que terminó como se sabe en las portadas de los periódicos.
El lugar se las trae. Quizás sea de las esquinas más complicadas para detenerse de todo Madrid. Un carril bus en pleno nudo de la plaza del Callao, con tres carriles en un sentido y dos en el otro, más una isleta desde la que, habitualmente, agentes municipales escrutan cada movimiento.
Esta tarde, sin embargo, no son ellos sino los autobuses que llenan el carril, que bajan en dirección a Plaza de España, los que frustran nuestro primer intento. Desistimos de parar al ser seguidos por una manada de buses. De intentar el aguirre ahora, además de la multa, podríamos provocar un pitote serio.
Damos la vuelta a la manzana y, esta vez sí, conseguimos pararnos en la esquina. El cajero al que bajó Aguirre se halla junto a un restaurante de la franquicia Café y Té que tiene una terraza en la ancha acera, y que, curiosamente, tiene un hueco entre dos mamparas de cristal que dan a la calle por donde el redactor a se baja.
Sin prisa, tarda apenas cinco segundos en llegar al cajero automático, donde espera pacientemente a que una señora termine de sacar dinero. El redactor b se mantiene en el coche. Observa a su alrededor. A apenas 70 metros, al otro lado de la Gran Vía, frente a la entrada de Metro de Callao, un coche de la Policía Municipal. En su interior, aparentemente, dos agentes.
Los taxis y los autobuses van sorteando el coche parado sin hacer sonar sus cláxones, sorprendentemente, como si ya estuvieran acostumbrados. Apenas pasados dos minutos, el redactor a vuelve al coche sin acelerar. Misión cumplida: es posible sacar dinero en el cajero aparcando el coche en doble fila en Callao sin que te multen. Tentamos a la suerte y nos quedamos más tiempo. Aguirridos. A ver qué pasa.
3, 4, 5,... Pasan los minutos y los agentes de Callao ni mu. El ulular de una sirena pone en alerta a los redactores. No es la Policía, que tiene una sede a menos de 500 metros, en Soledad Torres Acosta, sino una ambulancia. El cronómetro sigue avanzando. En el transcurso de los 8 minutos y 35 segundos, un par de taxis paran también en el carril bus, para dejar pasajeros. Y sólo un taxista, con ostensibles aspavientos, nos suelta la reprimenda.
La llegada de un coche del Ayuntamiento de los que vigila el carril bus, y que suelen grabar su recorrido con una cámara, provoca la huida del punto fatídico. Los redactores no son testigos de ninguna 'bronquita', pero la 'multita' está por ver si llegará."
http://www.elmundo.es/madrid/2014/04/04/533f2427e2704ec8338b4585.html
Mi opinión es que se la están jugando a la señora exagerando los hechos y la importancia de su maniobra.