Pues vengo yo a opinar todo lo contrario: con 2 niños es mucho más complicado.
Eso sí, no quita que con suerte acabe opinando como Narniana dentro de un año o así , pero ahora mismo con una de 4 años y el otro con 20 meses, es mucho peor que con uno.
Con el segundo te quitas la L del primero: te preocupas menos cuando está malo, o se cae, o los dientes, el culo, etc. Cambias pañales a la velocidad de la luz, los biberones ya solo les das un agua, etc...
En eso sí se nota que ganas.
Pero con uno, te repartes más. Hoy le doy de comer yo, luego le das tú de cenar que yo le di de comer, hoy duerme con Papá y dejamos a Mami en el salón un rato. Uno hace la cena y el otro está con el niño/bebé.
Y aún así todos decimos: madre mía es que no tengo tiempo para nada. ¡Hasta que llega el segundo y te das cuenta de lo que era tener tiempo!
Primero cuando llega el bebé que es totalmente dependiente y tienes que lidiar el atenderle con atender a la mayor o intentar jugar con ella.
Pero cuando el bebé crece y ya anda, coge cosas , parlotea , pero todavía no sigue unas normas ni las entiende, vamos a partir del año y medio o así, pues empiezas a liarte más aún.
Lo de comer te sigues repartiendo pero otro atiende a la mayor también, que si agua, que si me he manchado, ahora esto lo escupo, dame una servilleta, ahora tiro el vaso sin querer, y el otro atendiendo al pequeño ... con lo que antes uno estaba más tranquilo cenando y otro más liado con el bebé. Ahora no, ahora los dos liados.
Pero por ejemplo esto, que ha sido así hasta hace nada, ahora empiezan a sentarse juntos y a cenar juntos: a veces va más o menos bien, otras el pequeño escupe comida y la otra dice que le da asco y que se cambia de sitio, o el pequeño coge el plato y le da la vuelta y lo vacía en el suelo... así que las cenas no son muy tranquilas, pero han pasado de infierno a “más normales, y espero que en un tiempo prudencial se normalice y cenemos sin tantos rollos.
Lo de acostarse es un show porque la mayor se está acostando sobre 22:30 ahora en verano, pero el pequeño dura más que el conejito de Duracell y se acuesta sobre las 00:00. Así que lo que antes uno se permitía un rato tranquilo, o que la niña se dormía a las 21:30-22 y ya estábamos los dos juntos un rato en el salón, ahora es muy raro el día que eso se da, porque el que no se va con la mayor se queda con el pequeño en el salon, y además suele tener que ir a despertar al otro porque nos quedamos sopa con ella.
A veces juegan un poco juntos, pero todavía está la mayor con el esto es mío y no se lo dejo, que es lo normal en niños, pero yo no puedo dejar a esta sola porque a eso le agrega: o tirones de pelo, o pellizcos, o capones al hermano de 20 meses.... que mira que nos da rabia que tenga la mano larga cuando en casa nunca hemos empleado el castigo físico y todos los días tenemos que estar recordándoselo.
En fin, que con 2 yo tengo la sensación de no parar un segundo. Si un día se queda la mamá dormida tras comer (que yo nunca me duermo) , ya no puedes irte a cagar (XD) porque alguna te lían.
Esto también depende mucho de cómo te salgan. Si la primera fuera la princesa / niña mamá que cuida a su hermanito (que es como es él) y el segundo se durmiera a las 21:30-22 (que es como es ella), ya la cosa cambiaría muchísimo. Pero por ahora, no hemos parado.
Yo siempre dije que siempre íbamos a ir desde la peor situación e iríamos mejorando, porque según va creciendo el pequeño iríamos independizando todo un poco. Y puse el límite de “deberíamos ir ya bien, más tranquilos, y normalizando la vida en general” cuando el pequeño llegara a los 3 años. Y coincide con la edad de los niños de Narniana, así que entiendo que iremos a mejor a partir del verano que viene, hasta entonces, al lío.