Investigador 1 — Bien, hemos pasado los últimos 20 años investigando cacas de vaca. ¿Qué conclusiones tenemos para la Reunión? ¿Algo para el premio Nobel?
Investigador 2 — Em… pues en realidad… no tenemos nada en absoluto.
I.1 — ¿Nada de nada? ¿Veinte años hundidos en mierda para nada?
I.2 — Pues sí.
I.1 — Debemos hacer algo si no queremos convertirnos en el hazmerreír de la comunidad científica… por no mencionar a mi esposa.
I.2 — Pues podemos declarar un gran descubrimiento. ¿Qué tal si decimos que la interacción prolongada con bóñigas vacunas aumenta la inteligencia?
I.1 — ¡Sí! Así podemos aprovechar para decir que nosotros mismos somos más listos por esta investigación.
I.2 — ¡Perfecto! Solo esperemos que ningún inteligente (y sumamente atractivo) comentarista en algún blog español de humor nos descubra y nos ponga en evidencia con su comentario.
I.1 — Ni que ese mismo comentarista (listo y guapo) observe que, si somos más listos ¿por qué seguimos trabajando con mierda? Como sea, nos arriesgaremos, ¡premio Nobel aquí vamos!