#2576 Una cosa no quita la otra. Lo que estás diciendo es, a grandes rasgos, cierto, o al menos yo lo comparto. Pero la política es el ámbito que el ser humano ha inventado para organizar un poco todo ese cotarro. ¿Quieres negar la existencia de clases? Me parece correcto. Pero de ahí a negar la existencia de cualquier tipo de interés general, va un trecho bastante largo.
Yo entiendo que haya reticencias hacia cierto tipo de discurso que abusa de conceptos como "ciudadanía" "pueblo" y demás. Pero si tu apreciación consiguiente es que no existe ni el pueblo, ni la ciudadanía ni nada, pues oye, habrá que concluir que para qué la policía si no hay ciudadanos que proteger, para qué los servicios públicos, para qué los juzgados, para qué la sociedad... Montemos un saloon y al que moleste, duelo en la calle principal.
Además, la sociedad no siempre es una continua lucha entre intereses individuales, precisamente la vida en sociedad lleva implícita la asimilación de que nuestros intereses, aunque diversos, suelen converger. Suelen converger, además, en cosas muy razonables pero que hoy en día se le niega a mucha gente: tener un trabajo digno, una casa, una familia, tener para comprar el pan, tener para comprar la ropa, tener libertad de movimiento... Todo eso son intereses comunes a todos los ciudadanos, y por eso se habla de pueblo, por eso se habla de ciudadanía.
Y para terminar, dime si acaso esta frase: aplicar estas medidas independientemente de lo que opinen o dejen de opinar los individuos (absolutismo) no es 100% aplicable a lo que tenemos ahora. Si algo, para mí, distingue a Podemos de cualquier otra iniciativa política es, como se ha dicho mil veces, la participación ciudadana y el empoderamiento de la gente, precisamente Podemos parte de la base como un sistema de consensos, así que de todo el panorama político a priori es el menos indicado para recibir todo el aluvión de críticas que encajan mucho mejor en el resto de partidos.
#2580 Nah, tu tranquilo, si karlosin aquí opina enfundado en su traje neoliberal, pero después vota al PP, defiende las fronteras, las intervenciones militares y un largo etcétera de despropósitos incongruencias e incoherencias, cuando no, simple y llanamente, trolea como un imbécil.