Desde el 1 de enero de 2019 el cliente de Steam ya no es compatible con sistemas operativos antiguos como Windows XP o Vista. Esto ya se había anunciado el pasado verano, pero no ha sido hasta la entrada del nuevo año que ya se ha hecho efectivo.
Según declara Valve, apenas un 1% de los usuarios de la plataforma todavía usaban alguno de estos sistemas operativos, por lo que este cambio no debería suponer un gran impacto para la gran mayoría de los más de 150 millones de usuarios con cuenta de Steam. Si alguno todavía utilizabais XP o Vista os tocará actualizar a sistemas operativos más modernos para poder seguir usando Steam.