Nadie habla de regalar nada, simplemente, cuidar de los tuyos. Al menos eso es lo que entiendo yo, solidaridad con tu gente, no tienes por qué ir por ahí regalando € a desconocidos con cara de tristes. Si cada uno de nosotros tuviera la suficiente solidaridad con nuestras pérsonas más cercanas que lo están pasando mal (si es que las tenéis, algunos dudo que las tengan por sus respuestas), las cosas serían mucho más llevaderas.
Creo que hay mucha gente que no tiene realmente conciencia de lo que está pasando. Yo ya son varios los conocidos, vecinos y algún que otro amigo que les veo esperar en algún local o iglesia para recoger alimentos con la etiqueta de la UE para las personas en situaciones desfavorecidas.
Se ha perdido toda esa escuela de ayuda al vecino, al colega, al compañero de curro... Yo creo que en estas situaciones, hay dos maneras de enfrentar las cosas:
Transformarlo en un 'todo contra todos', ver quien sobrevive y tirar hacia arriba pisando a los demás.
Tener algo de conciencia y solidarizarte con los tuyos, ayudar a gente que un día te ayudó, o que en algún momento crees que te ayudará, saber que los tendrás ahí para X situación porque nadie se libra de las malas rachas ni de las putadas que no te esperas. Hacer de lo malo una situación más llevadera a base de la amistad, la amistad de verdad, la que se demuestra en los malos momentos.
Los de arriba, esos a los que votamos y creemos que nos sacarán de ésta, parecen demostrar que, por el momento, no se preocuparán de nosotros. Ellos harán sus artimañas, sacarán sus datos de aquí y de allá, actuarán en función de porcentajes y después anunciarán X reforma allí, X recorte aquí y X congelación para los funcionarios aquí... Pero no son ellos los que paran en las puertas de Cáritas con las bolsas grandes de Carrefour, ni los que patean las calles arriba y abajo echando currículums que no servirán de nada, ni los que se cascan los cursillos del paro con la convicción de que "eso hace" y creyendo que después de este o aquél cursillo les llamarán para darles un trabajo.
En mi opinión, ahora mismo el político medio, al menos en las grandes ciudades, no es consciente de los problemas reales de la clase baja, esa que tanto ha crecido durante estos años. Así que lo mejor es que cuidemos los unos de los otros, si a alguno le resulta una situación rara, que pregunte a sus abuelos por la pos-guerra.
