En época de elecciones (o post-elecciones, pues felizmente han terminado, pues estaba hasta los huevos de tanta mentira y tanto interesado reunido), aquellas en las que los políticos parecen llenarse de buenas intenciones e ideas, cosa sorprendente pues apenas hacen una semana al año (mes de elecciones cada 4 años... pues eso), si bien tenemos que aguantar sus estupideces, esperpentos y etc todo el jodido resto del año. En fin.
Lo que me ronda la cabeza desde hace días es el sinsentido de aplicar las votaciones por circunscripciones junto a la disciplina de partido. Para los que no tengan claro exactamente cómo funciona cada cosa: la disciplina de voto es aquel principio tan majo declarado constitucional que implica que los políticos electos de cualquier político se supeditan y subrogan a lo que las cúpulas de sus partidos dictaminen, so pena de recibir multas o no ir en las siguientes listas (se hacen excepciones para determinados políticos hiper bien valorados que no son fácilmente sustituibles... o sea, para menos del 1%). Lo que viene siendo una patada en los cojones a los votantes, pues si yo voto PP aquí en Ibiza, resulta que el jefe del político ibicenco no soy yo (+ resto de votantes) sino que tienen que comerle la polla al de Mallorca/Madrid. Respecto a las circunscripcones, básicamente consisten en repartir los votos por provincias/diputaciones. Y puesto que para no dejar a zonas sin representación aumentan el número de escaños de dicha zona (o ponen uno, como es el caso de Formentera, que tiene un senador para una población super escasa), nos encontramos con otro chanchullo: que el voto de un formenterés vale más que el de cualquier otro español, pues el ratio población/escaños es muchísimo menor.
Venía diciendo lo del sinsentido por lo siguiente:
a) La disciplina de voto implica que el "jefe" es el partido, y no el votante directo.
b) Las circunscripciones implican que el voto no se lo lleva el partido a nivel comunitario, sino que se lo lleva el representante de la diputación/región/provincia en cuestión.
¿Pero nos toman por gilipollas o qué? ¿Para qué cojones queremos las circunscripciones si tenemos disciplina de voto? De la misma forma, ¿para qué cojones queremos disciplina de voto si tenemos circunscripciones? Un jodido sinsentido tremendo.
También es un sinsentido tremendo que la gente siga votando partidos que abusan de la disciplina de voto sobremanera, como el PP y el PSOE, cuando simplemente ese motivo debería ser suficiente para que nadie les votara. ¿O tiene sentido que al diputado por Aragón le importe más lo que diga la cúpula de su partido en Madrid que lo que sea mejor para sus votantes? No, no tiene ni puto medio sentido.
Pero esto es España... donde en lugar de democracia tenemos una memocracia. Encima, gustamos de culpar a los políticos cuando éstos son una fiel imagen de la sociedad. A lo mejor me estoy volviendo yo loco.