Detenida en Elda por asfixiar al hijo de su novio

EFE Alicante 1 jun. 2018 17:02

• Ha declarado que se asustó mucho al ver que el pequeño estaba muerto y que ese temor le indujo a simular el asalto
• Su nueva versión no cuadra en absoluto con el resultado de la autopsia, según la cual el pequeño falleció estrangulado con su propia camiseta
• Detenida la 'madrastra' de Dominique

Alejandra G.P., la mujer detenida este jueves en Elda por el presunto asesinato de Dominique, un niño de 8 años al que su novio tenía en acogida, ha alegado hoy que aquél murió al atragantarse con un trozo de jamón, aunque la juez ha decretado su ingreso en prisión provisional.

Así lo han informado a Efe fuentes de la investigación después de que la mujer haya prestado declaración judicial, en la que la fiscal le ha acusado inicialmente de un delito de asesinato, aunque la instrucción de la causa determinará si se mantiene esa figura penal o se rebaja a homicidio, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

La sospechosa ha admitido que mintió en sus declaraciones anteriores como testigo, en las que aseguró que ella y el menor habían sufrido un asalto violento en su vivienda por parte de dos desconocidos, según fuentes próximas al caso.

En esta línea, ha declarado que se asustó mucho al ver que Dominique estaba muerto, y ese temor le indujo a simular el asalto.

Su nueva versión, sin embargo, no cuadra en absoluto con el resultado de la autopsia, según la cual el pequeño falleció estrangulado con su propia camiseta, han precisado las fuentes consultadas.

Alejandra G.P., de 31 años, fue detenida el jueves, sobre las 9.30 horas, por agentes del Grupo de Homicidios de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de Alicante y Madrid, que registraron luego su casa y la de sus padres, y se incautaron de ropa y material informático, entre otros efectos.

El crimen de Dominique, un pequeño con discapacidad tutelado por la Generalitat Valenciana y dado en acogimiento al novio de la detenida, y a la anterior pareja de éste, se produjo el pasado 30 de agosto en un piso de la calle Don Quijote, de Elda.

El pequeño se encontraba ese día, sobre las 20.00 horas, al cuidado de la novia de su padre de acogida, cuando falleció por asfixia.

Alejandra G.P. aseguró entonces a la Policía que dos individuos provistos con cascos y prendas de motorista les habían asaltado en el rellano del edificio para obligarles a entrar de nuevo a la vivienda a la fuerza.

De acuerdo con esa versión anterior, los desconocidos la maniataron y le colocaron una bolsa en la cabeza, le propinaron varios golpes y llegaron incluso a realizarle tocamientos de tipo sexual antes de darse a la fuga.

Sin embargo, los investigadores no dieron ninguna credibilidad a su testimonio y descartaron en el transcurso de las pesquisas la participación de terceras personas en el suceso.

La Policía cree que Alejandra G.P. estranguló al pequeño con la propia camiseta que éste vestía y trató luego de proporcionarse una coartada mediante el montaje de escena del asalto.

Una de las principales hipótesis sobre el móvil del crimen es que Dominique suponía un obstáculo en la relación sentimental que la presunta asesina había iniciado con Daniel Faus, un conocido entrenador de atletismo local del que estaba entonces embarazada y con el que ha tenido un bebé este año.

La detenida aceptó finalmente prestar declaración anoche en la comisaría local del Cuerpo Nacional de Policía y lo hizo asistida por una abogada de oficio después de que el letrado particular que habían designado sus padres renunciase a ejercer la defensa.

Durante ese interrogatorio, la mujer se retractó ya de sus anteriores declaraciones, reconoció que había mentido y atribuyó la muerte del niño a un accidente, según fuentes conocedoras del caso.

La presunta asesina ha sido trasladada sobre las 11.00 horas de esta mañana a los juzgados de Elda, donde ha sido increpada por algunos de las cuarenta personas que se habían congregado a las puertas de la sede judicial para esperar su llegada.

Tras declarar ante la juez y ordena ésta su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, la sospechosa ha sido conducida hasta los calabozos de la Policía Municipal, donde la Guardia Civil debe recogerla en las próximas horas para llevarla a la cárcel.

GEMA PEÑALOSA Alicante 2 jun. 2018 08:09

• El ADN hallado en el mango es suyo a pesar de que dijo que la lesionaron los asaltantes
• Se trata de una de las pruebas determinantes para inculparla
• La mujer cambia este viernes su versión y dice ahora que el menor murió al atragantarse con un trozo de jamón

Unas tijeras fueron el principio del fin, policialmente hablando, para Alejandra, la mujer detenida a primera hora del pasado jueves por el crimen de Dominique, el hijo adoptivo de su novio. Este instrumento, según ha podido saber EL MUNDO, ha sido determinante en las pesquisas.

Al parecer, como parte de la simulación del asalto de su casa, Alejandra se autolesionó en el pecho con unas tijeras. Se causó varios cortes y los atribuyó a los supuestos hombres que decía que habían irrumpido en su vivienda. Pero nada más lejos de la realidad. El ADN la ha delatado. Además, la Policía está convencida de que tuvo intención de matarlo, que no fue un accidente.

Tras examinar las tijeras, los únicos restos de muestras biológicas son de ella. De nadie más. Ni siquiera aparece ADN de origen desconocido. Los investigadores se preguntaron si los supuestos asaltantes podían haber usado guantes pero esta teoría no tardó en desvanecerse ante la seguridad de los policías de que el relato que les había ofrecido era falso.

Tampoco hallaron muestras biológicas de otras personas que no fuera Alejandra en los distintos puntos de la casa donde aseguraba haber sido atada, amordazada y agredida. Las tijeras tenían sangre, la de Alejandra, pero también su ADN en el mango. También encontraron sangre y ADN suyo en el carrito de su hijo de 2 años, que en ese momento no estaba en casa. Ella les había dicho que los delincuentes estuvieron manipulándolo.

Desde el principio, los agentes sentaron las bases de sus pesquisas en estas pruebas.Era fundamental que todo estuviera bien atado para asegurarse el éxito del dispositivo. Todas las muestras se remitieron al Instituto Nacional de Toxicología con sede en Barcelona y los resultados han tardado varios meses en llegar. Desde entonces, no le han quitado ojo a Alejandra.

Así, fueron dejando atrás las distintas teorías que se abrieron paso inmediatamente después del crimen como que la muerte de Dominique pudo deberse a un hipotético ajuste de cuentas.

Por su parte, Alejandra seguía manteniendo que fueron varios hombres los que los asaltaron a ella y a Dominique en el portal de su casa. Sin embargo, a medida que pasaban las horas su relato se desmoronó a ojos de los agentes. No se sostenía. Fue entonces cuando se convirtió en la principal sospechosa. Además, la investigación ha determinado que tuvo intención de acabar con la vida del menor y que después ella simuló el asalto a su casa. Los agentes realizaron registros domiciliarios en Elda durante todo el día del jueves. Uno en la vivienda a la que la pareja se había mudado tras el crimen y otro de los padres de Alejandra.

Este viernes, la mujer volvió a cambiar su versión de los hechos ante el juez y aseguró que el pequeño había muerto tras atragantarse con un trozo de jamón cuando estaba bajo su cuidado. Ella dice que entró en pánico y que ese temor le indujo a simular el asalto. Esto no cuadra en absoluto con el resultado de la autopsia, según la cual el pequeño falleció estrangulado con su propia camiseta.

La juez decretó finalmente el ingreso en prisión provisional de Alejandra, a quien la fiscal acusó inicialmente de un delito de asesinato. No obstante, la instrucción de la causa determinará si se mantiene esa figura penal o se rebaja a homicidio, según comunicó el Tribunal Superior de Justicia valenciano.

GEMA PEÑALOSA Alicante 3 jun. 2018 02:15

• El crimen del pequeño Dominique, perpetrado el pasado 31 de agosto en el municipio alicantino, ha hecho que todas las miradas se vuelvan al de Gabriel Cruz
• Los dos murieron a manos de las novias de sus padres y ambas tuvieron intención de matar
• Alejandra quiso matar a Dominique

Repasando los contornos del crimen de Dominique es inevitable establecer ciertos paralelismos con el de Gabriel Cruz, el niño de las Hortichuelas que fue asesinado por la novia de su padre, Ana Julia Quezada. Si bien es cierto que en el caso del pequeño de Elda no hubo secuestro ni la crueldad que sí tuvo el de Almería, con Quezada participando activamente en la búsqueda del menor cuando ella misma lo había matado y enterrado la misma tarde de la desaparición, también lo es que en ambos subsiste un mismo perfil: que ambas eran parejas de los padres de los niños y que las dos tuvieron intención de matar.Sus parejas y padres de los niños nunca estuvieron bajo la lupa de los investigadores

Alejandra estaba embarazada de cuatro meses del padre adoptivo de Dominique y tenía un niño de dos años de una relación anterior. Dominique convivía con su madre, la exmujer del novio de Alejandra, pero pasaba fines de semana con ellos y parte de las vacaciones. Fue justo uno de esos días cuando se produjo el homicidio. Los agentes desvinculan totalmente al padre, Daniel faus, de los hechos. Alejandra actuó sola. Al igual que lo hizo Ana Julia. Y quiso matarlo, según las pesquisas.

Alejandra se inventó un asalto. Y que lo preparó a conciencia. Se autolesionó y alteró la escena del crimen revolviendo toda la casa. Después, tal como avanzó EL MUNDO, cogió unas tijeras y se autoinfrigió cortes en el pecho. Eso fue su perdición. Dejó su ADN en en el mango y eso ha sido una pista determinante para los investigadores. También le quitó los pantalones al pequeño.

A la llegada de los agentes, Alejandra dijo que dos hombres con cascos de moto la habían interceptado en el portal cuando salía de casa con Dominique y que a ella la maniataron, la sentaron en una silla, le pusieron una bolsa de plástico en la cabeza y la golpearon. Todo fue, según su versión, sin mediar palabra. Las piezas no encajaban a los agentes. Su relato no cuadraba.

Alejandra relató a la Policía lo que había sucedido y todo lo que alcanzaba a recordar de aquel momento. Incluso precisó, tal como consta en su declaración, que había visto flashes durante el asalto. Pese a la violencia que indicó que los dos agresores emplearon con ella, su bebé no corría peligro.

Arrancaba entonces una investigación que ha mantenido absorbido al Grupo de Homicidios de la Comisaría de Alicante. La gravedad del suceso hizo que, en un principio, se abrieran todas las hipótesis y que incluso hayan intervenido agentes de la Comisaría General de Policía Judicial al igual que sucedió con el crimen de Gabriel Cruz cuando la Guardia Civil de Almería recibió el apoyo de la Unidad central operativa (UCO) del Instituto Armado. Se investigó todo. Nada se ha dejado de tocar.

Los agentes se centraron única y exclusivamente en el entorno más próximo de la pareja tras abandonar también la teoría de que el suceso tuviera relación con la familia biológica de Dominique. Después, ya rodaba en torno a Alejandra. Las contradicciones eran notables pero a los agentes les hacía falta algo más: el ADN.

Hubo una premisa: la investigación se iba a desarrollar bajo la calma porque cualquier movimiento en falso podría derribarla. Los agentes guardaban un as bajo la manga: si, como decía Alejandra, en su casa habían entrado varios desconocidos y la habían asaltado, entonces habrían dejado algún rastro biológico. Tomaron muestras de varios objetos, entre ellos las tijeras con las que Alejandra decía que la habían agredido, y los mandaron a analizar. Ninguno de ellos contenía ADN que no fuera el de la detenida. Ahora sí tenían todas las aristas pulidas. Ahora sí podían practicar una detención que ha conmocionado Elda.