Da que pensar.. suena como una auténtica motosierra. Parece que estuviera poseída por un leñador de las profundidades del Canadá.
Y la vacuna para no ser poseido CASUALMENTE es ser ateo.
La diferencia es que si eres creyente crees que te ha poseido un demonio mientras que si eres ateo crees que eres xanquete bailando tecnodance.
Hay exorcismos y exorcismos.
Yo me considero una persona bastante excéptica y creo que la explicación más racional y científica tiene prevalencia sobre el resto. No podemos comparar ciencia y logos frente a superstición y mito.
Pero es cierto que se han dado casos de gente poseida de verdad, casos que se saltan todas las leyes naturales conocidas y muy incómodos de explicar por la ciencia actual.
Oí una vez el caso de un grupo de amigos (mayorcitos, entre 20 y 30 años, no los típicos adolescentes) que se pusieron a jugar a ouija, excepto una mujer, que no quiso porque le daba yuyu y se fue a echar una siesta a la habitación de al lado.
Días más tarde la tipa esta hablaba no se cuantas lenguas, algunas antiguas tan antiguas que ya casi nadie conoce, tenía una fuerza sobrehumana, y tenían que atarla a la cama porque sino los ostiaba a todos como Chuck Norris tras tomarse una docena de Red Bulls.
La Iglesia autorizó a un cura para hacer un exorcismo (esto no lo hace cualquier cura, hace falta alguien con unos estudios muy concretos dentro de la doctrina católica) y decidieron llevarla atada y a empujones a una iglesia. Nada más entró la poseida por la puerta, entró en una especia de coma o trance y ante lo ojos de todos los testigos levitó hasta el altar de la iglesia.
Cuando despertó no recordaba nada, volviendo a la normalidad en su vida.
Este es uno de los pocos casos constadados por la Iglesia como auténtico de posesión demoniaca.
De hecho, la mayoría de los exorcistas (de los buenos exorcistas) saben que solo uno de cada 10000 casos o más es auténtico. El resto son enfermedades mentales o psicológicas que para curarlas, les siguen la corriente con toda la pantonima del exorcismo. Placebo puto, puro y duro.
Sin embargo, el caso de Emily-Rose... pues como que no.