Podemos impulsó la figura del “relator” en noviembre y propuso a Daniel Innerarity
La formación morada apoya al Gobierno de Sánchez pero cree que los socialistas han reaccionado muy tarde para tratar de desbloquear el apoyo catalán a los presupuestos.
Irene Montero, portavoz del grupo parlamentario confederal de Unidos Podemos, En Comú, En Marea, ha dado cobertura y apoyo sin fisuras, a primera hora del miércoles, a la iniciativa del Gobierno de Pedro Sánchez de introducir un convidado de piedra y testigo, un “relator” en las conversaciones Gobierno-Generalitat, sean bilaterales o en la mesa de partidos.
No es sorprendente ni novedoso. Desde mismo estallido de la crisis catalana, en septiembre de 2017, Unidos Podemos y En Comú han impulsado la solución política dialogada y bajo los auspicios, si es menester, de cualquier tercero, sean el resto de fuerzas políticas u otra figura institucional que pueda lubricar el diálogo. Ese era el espíritu de la Declaración de Zaragoza, donde se reunieron los cargos públicos de Unidos Podemos y sus confluencias de todo el Estado con destacados políticos de ERC, PDECat y PNV.
Tan así que el pasado noviembre, durante las intensas negociaciones desplegadas por Unidos Podemos para dar curso al acuerdo presupuestario que habían alcanzado con el Gobierno de Sánchez en octubre, los morados propusieron una mesa de negociación bilateral auspiciada por un “relator” neutral que articulara las negociaciones bilaterales que desbloquearan la situación política en Catalunya. Y hasta se impulsó un nombre de prestigio y con un perfil político de consenso, el del filósofo Daniel Innerarity, próximo al PNV (partido con el que llegó a figurar en una lista electoral) y al que se considera una de las referencias intelectuales del nacionalismo vasco post-Ibarretxe. Es decir, de la era Josu Jon Imaz. El PSOE no se atrevió.
En Podemos, no obstante, hay cierta desazón, porque consideran que el Gobierno se ha decidido a impulsar medidas de diálogo político que desbloqueen la situación política catalana y la española demasiado tarde, a apenas una semana de la votación de las enmiendas a la totalidad.
No obstante, la formación morada sigue impulsando lo que Montero denominó el pasado lunes “negociaciones discretas” con todas las partes. En las últimas horas desde Podemos se han reanudado las conversaciones con todas las fuerzas del bloque de la moción de censura para intentar salvar in extremis la votación de la enmienda a la totalidad de los presupuestos.
Pese a la intensa actividad discreta, Unidos Podemos está manteniendo un perfil bajo en el estallido del supuesto escándalo del “relator”. Apenas las declaraciones de Montero, un perfil bajo que es más contingente que estratégica: los cargos más activos del llamado espacio del cambio en esta cuestión desde 2017 han sido Xavier Domènech, ex líder de los comunes y hoy retirado de la política y Pablo Iglesias, secretario general de Podemos y hoy de baja por paternidad.
La impresión en Podemos, de cualquier modo, es que el Gobierno de Sánchez intentará retrasar las elecciones, al menos hasta el otoño, incluso en el caso de que ERC y PDECat voten junto al PP y Ciudadanos, y que intentará introducir parte del programa social pactado con Podemos a través de decretos.
Hay, no obstante, una última esperanza para el trámite presupuestario: que la opción, digamos, venezolana de las derechas –incendiar la calle a partir de este domingo para tratar de forzar el cese de Pedro Sánchez, ante la imposibilidad de lograrlo en el Congreso– reagrupe a los aliados de la moción de censura para dar aire a Sánchez, permitir el debate parlamentario de las cuentas y evitar el descarrilamiento de la legislatura.
https://www.lavanguardia.com/politica/20190207/46279171321/podemos-relator-daniel-innerarity.html